Las manifestaciones contra la estricta política conocida como ‘Covid cero’ se amplían a peticiones, dentro y fuera del país, a la renuncia del presidente Xi Jinping. Ante el enfado, el Gobierno informó este 28 de noviembre que relajará algunas de las restricciones, pero ratificó que no cambiará el rumbo de sus medidas cuando aumentan los contagios. Al menos una docena de ciudades en el extranjero, entre ellas Londres, París y Tokio, se han sumado a las manifestaciones en solidaridad con los ciudadanos chinos.
La estricta política destinada a erradicar el covid-19 en China se ha convertido en un pararrayos de frustraciones.
Las actuales protestas, la mayor muestra de oposición al gobernante Partido Comunista en décadas, se extienden a llamados a que el presidente Xi Jinping, con diez años en el cargo, abandone el poder.
“Retírate Xi Jinping”, “no a la dictadura, queremos democracia”, “abajo el Partido Comunista” o “no más confinamientos, queremos libertad” están entre los principales llamados en las protestas que iniciaron por la política conocida como ‘Covid cero’. Peticiones insólitas en un país donde revelarse contra su Gobierno es un paso de riesgo y las manifestaciones son inusuales.
“La política de ‘covid cero’ es una especie de chispa que encendió esta ola de protestas, pero debajo de eso, cada vez vemos más personas expresar quejas, no solo por el ‘Covid cero’ sino con una naturaleza más amplia por el sistema político”, señaló el profesor de Política y Asuntos Internacionales, en la Universidad de Princeton, Rory Truex.
“Ahora les estamos demostrando apoyo desde el extranjero”
El fatídico incendio en Xinjiang, donde 10 personas murieron la semana pasada tras quedar atrapadas en sus apartamentos, un desastre atribuido a las estrictas medidas de cierre, aunque las autoridades lo niegan, prendió la mecha del descontento social. A veces, una tragedia basta para despertar la ira de un pueblo.
Muestra de ello es la extensión de las movilizaciones a al menos una docena de ciudades chinas y las protestas en el extranjero en solidaridad con los ciudadanos afectados.
Vigilias y manifestaciones tienen lugar en localidades de Europa, Asia y América del Norte. Entre ellas, Londres, París, Tokio y Sídney.
Afuera del Centro de Arte y Cultura Pompidou, en la capital francesa, activistas trajeron flores y encendieron velas por los muertos en el incendio de Xinjiang. Algunos culparon directamente al presidente Xi Jinping y al Partido Comunista y exigieron su destitución.
“Es lo que debo hacer. Cuando vi a tantos ciudadanos y estudiantes chinos salir a la calle, siento que han asumido mucho más que nosotros (…) Ahora les estamos mostrando apoyo desde el extranjero”, afirmó Chiang Seeta, uno de los organizadores de una manifestación en París.
No obstante, en una sesión informativa este lunes 28 de noviembre, el Ministerio de Relaciones Exteriores chino señaló no estar al tanto de ninguna protesta en el extranjero que ponga fin a su política de ‘Covid cero’.
El Gobierno chino relaja algunas restricciones en medio de las protestas
En las últimas horas, las autoridades de Beijing anunciaron que ya no instalarán puertas para bloquear el acceso a los complejos de apartamentos donde se han detectado contagios de Covid-19.
“Los pasos deben permanecer despejados para el transporte médico, los escapes de emergencia y los rescates”, afirmó Wang Daguang, funcionario de la ciudad a cargo del control de la epidemia.
En su anuncio, no se refirió a las acusaciones de los manifestantes que señalan que bomberos y víctimas que intentaron huir de las llamas quedaron bloqueados por los controles antivirus, en el fuego de la semana pasada.
Asimismo, este lunes la metrópolis manufacturera y comercial del sur de Guangzhou, el mayor punto crítico en la última ola de contagios en el país, anunció que ya no se requerirá que algunos residentes se sometan a pruebas masivas. Las autoridades locales se refirieron a la necesidad de optimizar los recursos.
Aumentan los contagios de coronavirus
Este lunes, las autoridades informaron un quinto récord diario consecutivo de contagios de Covid-19. El número de casos en las últimas 24 horas ascendió a 40.347, incluidos 36.525 sin síntomas.
Aunque el pasado octubre el partido gobernante prometió reducir el alcance de su política sanitaria, lo que hasta ahora fue una aceptación generalizada tres años después de que apareciera la pandemia, esta se ha agotado y la Administración de Xi no tiene planes de cambiar su rumbo de forma sustancial.
El periódico del partido gobernante, ‘People’s Daily’, pidió que su estrategia antivirus se lleve a cabo de manera efectiva, indicando que el Gobierno de Xi no tiene planes de cambiar de rumbo.
“Los hechos han demostrado plenamente que cada versión del plan de prevención y control ha resistido la prueba”, reportó el medio oficialista.
Las duras políticas sanitarias de Beijing han mantenido las cifras oficiales de muertes por el virus más bajas en comparación con las de otros países, pero a cambio los ciudadanos han asumido el costo de largos períodos de confinamiento y daños en la segunda economía más grande del mundo.
Con France 24,Reuters, AP y EFE