A pesar de la crisis comercial del rubro tradicional, pero impulsada por el tiempo libre y la lectura digital en múltiples plataformas, durante el Aislamiento Obligatorio en la Argentina creció en un 45% la lectura en sus distintos formatos. Los Best Sellers de ficción, autobiografías de famosos, novelas de terror y libros de autoayuda, se disputan la cima entre los géneros más buscados.
En un contexto de pesimismo editorial, los datos alentadores surgen en lo social, a partir de un sondeo estadístico entre los diferentes núcleos sociales y etarios, realizado por la firma Ghostwriter Argentina, desde la cuarentena hasta el pasado 1 de agosto.
Con el fin de observar el comportamiento colectivo intelectual, en tiempos de coronavirus el relevamiento se realizó sobre un total de 7.834 casos efectivos, en el ámbito del AMBA, Mar del Plata, Rosario, Santa Fe, Córdoba, Mendoza, Neuquén y Santa Cruz. Se realizó a través de una investigación cuantitativa y en base a un cuestionario con una encuesta telefónica en personas de entre 18 y 65 años.

A nivel general, el informe arrojó que el 45,7 % de los consultados reconoció haber comenzado a leer mucho más durante el confinamiento. Si de causas se habla, sobre ese total, el 66,2% afirmó “recobrar costumbres de lectura que habían abandonado por falta de tiempo”, el 21,4% dijo que “el afán por distraer la mente y relajar temores lo llevó a sumergirse por mucho más tiempo en el mundo de las letras” y, por último, el 12,4% restante, señaló que se inició en la lectura para “dar lucha al aburrimiento”.
En su ejercicio, el 43,2% expresó que retomó alguna obra literaria, el 28,6% dijo haber accedido a nuevos títulos de autores nacionales e internacionales a través de compras online de libros físicos y, el 28,2% indicó que se volcó mucho a la lectura a través de las distintas plataformas y formatos de libros digitales.
En cuanto a edades, el muestreo detalla que la suba fue de un 40,7% entre personas de 18 y 35 años, mientras que en el segmento que va de los 36 a los 65 años, el interés se disparó un 59.3%. En cuanto al género, los datos fueron muy parejos, con un 52,7% de mujeres y un 47,3% de hombres.
Respecto a la venta de e-books y la suscripción a bibliotecas digitales en internet creció en Argentina un promedio de 44,3% desde el inicio de afección viral. Sin embargo, en estos segmentos, los números a nivel local todavía están muy lejos de asemejarse a las estadísticas del viejo continente, siendo que, en los países europeos más afectados, el crecimiento casi triplica los indicativos nacionales. Como ejemplo, en España, durante el aislamiento obligatorio, la suba de usuarios en la plataforma eBiblio, el servicio de préstamos de libros electrónicos de bibliotecas públicas organizado por Gobierno de ese país, ascendieron a un promedio sostenido de 120% y casi se duplicó el número de visitas a su web.
Así como psicólogos y neurólogos reconocen por estos días que los sueños, literales, y el recuerdo de los mismos se profundizan durante el aislamiento, fundamentalmente por cuestiones de estrés o ansiedad, también florecen otros aspectos sensoriales que se manifiestan como inquietudes que disparan la necesidad de cumplir los otros sueños, los terrenales, aquellos que se pueden concretar.
“Hemos recibido entre un 25 y un 30 % más de consultas durante los últimos cuatro meses, por parte de personas que quieren editar sus propios contenidos”, afirmó el Director Adjunto de la organización, Fernando Iannace.
Para Iannace “en tiempos en donde el miedo a la muerte subyace con crueldad, escribir un libro propio es como dejar una huella marcada en la eternidad”.
Al parecer, pandemia y cuarentena conformaron una simbiosis a través de la cual lograron resucitar el vuelo intelectual de quienes buscan ser navegantes de historias ajenas, pero 2 también serán reconocidas por alumbrar un sinfín de nuevos autores, biológicos o adoptivos, de títulos e historias que nutrirán el ecosistema literario para siempre.