Los Centros de Corredores de Cereales de Bahía Blanca, Buenos Aires, Rosario y Santa Fe expresaron “preocupación cuando la figura cooperativa se utiliza para conformar entidades de gran tamaño que, aprovechando exenciones fiscales como la no tributación del Impuesto a las Ganancias” porque “generan condiciones de competencia desiguales frente a las pequeñas y medianas empresas.
“Consideramos que esta situación distorsiona el mercado, se aleja del espíritu original del cooperativismo y viola el principio constitucional de igualdad de los ciudadanos ante la carga de los tributos. Este principio garantiza que todos deben ser tratados de manera equitativa en materia fiscal, contribuyendo al sostenimiento del Estado en proporción a su capacidad económica y sin discriminaciones arbitrarias”, afirmaron en una comunicación a la prensa. Y agregaron: “Es fundamental revisar el marco regulatorio para eliminar distorsiones y asegurar que todas las entidades, independientemente de su figura jurídica, compitan en igualdad de condiciones”.
Las entidades financieras agroindustriales se reconocieron comprometidas con los principios fundamentales del cooperativismo agrícola en Argentina y subrayaron que valoran “el papel histórico que las cooperativas han desempeñado en el desarrollo y fortalecimiento de las comunidades rurales, promoviendo la colaboración y el crecimiento sostenible del sector agropecuario”.