Tras ser pospuestas por la pandemia el pasado 11 de abril, este 15 y 16 de mayo los chilenos podrán votar, por primera vez en su historia, en un proceso electoral destinado a elegir a las 155 personas que redactarán la nueva Constitución, además de alcaldes, concejales y gobernadores.
Chile está cerca de votar en una de las elecciones más importantes de su historia. Después de varios retrasos a causa de la pandemia, la ciudadanía podrá elegir quienes serán los responsables de redactar el nuevo texto de la Carta Magna del país austral. El proceso que ha llevado a esto ha sido uno de los más importantes en la historia reciente del país y se ha dado gracias a las protestas que comenzaron en 2019 y al voto afirmativo en un referendo.
El presidente Sebastián Piñera remarcó hoy la trascendencia de la megaelección de este sábado y domingo “van a marcar el rumbo” social de Chile, y consideró que “sin duda, estas elecciones son muy trascendentes porque van a marcar el rumbo de nuestro país y sociedad por las próximas décadas”.
A juicio de Piñera, su gobierno adoptó un “compromiso con fomentar la participación” en la ida a las urnas y con que el ejercicio sea “pacífico y seguro”, y destacó las condiciones sanitarias que tiene Chile actualmente.
Las elecciones a la Convención Constituyente, previstas originalmente para el 10-11 de abril y pospuestas anteriormente por la segunda ola de contagios de coronavirus, se celebrarán el 15 y 16 de mayo, para elegir a las 155 personas encargadas de elaborar una nueva Constitución en el país que sustituya la heredada por la dictadura de Augusto Pinochet en 1980.
La Convención Constituyente fue la opción que surgió de las urnas el pasado 25 de octubre, cuando los chilenos decidieron en la votación con una participación de casi 80 por ciento de la población, cambiar la Constitución y hacerlo en la forma de una Convención Constituyente, por miembros del pueblo, rechazando una Convención mixta con una participación del 50% de políticos. El plebiscito fue uno de los principales logros del estallido social de octubre de 2019 que tambaleó las estructuras sociales, económicas y políticas del hasta entonces considerado como uno de los países más estables de la región.
Esta será la primera vez en la historia que el país cuente con una Constitución elaborada y aprobada por su ciudadanía y que se han reservado 17 escaños para sus 10 pueblos originarios.
¿Cómo son los candidatos a los 155 miembros de la Constitución?
Serán las elecciones con mayor número de candidatos en su historia, casi 16.000 entre las 4 elecciones que se celebran de forma conjunta, constituyentes, alcaldes, concejales y gobernadores regionales, que también se votan por primera vez.
Para la Convención Constituyente se presentan un total de 1.373 candidatos, de los cuales 649 son mujeres y 629 hombres, a los que se suman los 95 candidatos indígenas que solo pueden ser votados por aquellos que se autoclasificaron como tales en el padrón electoral. Según el Servicio Electoral 793 de los 1278 candidatos por distrito son independientes pero asociados a algún partido político.
Un problema de toda esta variedad es la gran cantidad de opciones que hay por elegir y la dificultad para asegurar que actores teóricamente independientes son de una línea ideológica o de otra.
“En algunas papeletas son 80 candidaturas, organizadas en 10/12 listas, (…) hay distritos con 50, 70 candidatos. El voto es individual, votas por el individuo dentro de una lista y además con una fuerte crítica a los partidos políticos. Aunque los candidatos vayan con partidos no están promocionando de qué partido son”, lo que genera “un problema de identificabilidad, cómo yo identifico a mi candidato que está entre 70 candidaturas”, asegura el licenciado en Ciencias Políticas de la Universidad Diego Portales, Claudio Fuentes.
Sistema de votación
El sistema de votos que se va a aplicar sigue el principio de D’Hondt, que beneficia a las listas más votadas.
“En el sistema de D’Hondt se cuenta primero los votos que obtiene la lista y de las listas más votadas los que obtienen los escaños son los candidatos más votados. El efecto que tiene es que si en una lista hay alguien que sacó el 50% de los votos y otro que sacó el 2% de los votos pero que sumada la lista ganan un 52% de los votos eventualmente pueden obtener un número de escaños mayor”, explica Fuentes, es decir el candidato con un 2% puede obtener un escaño antes que otro que tuvo, por ejemplo, 15% pero cuya lista no ganó tantos votos.
“Se puede producir el efecto de arrastre, que candidaturas muy populares arrastren gente de la lista que tienen pocos votos, como hemos visto en otras elecciones”, señala el analista.
En Chile se critica con frecuencia que algunos parlamentarios han sido elegidos con un pequeño número de votos.
“Responde a esta visión que prioriza el voto por el individuo o la persona y no por la idea o por la lista. En Europa los sistemas proporcionales son con lista cerrada, votas por un programa. Aquí, aunque se organiza por listas, votas por individuos y esto genera esta sensación de descontento porque llega gente con pocos votos”, apunta Fuentes.
En cuanto al equilibrio hombre-mujer, “el sistema está hecho para que tienda a la paridad, en cada lista va a ir una mujer, un hombre, etc. Lo que se denomina lista Zebra. La evidencia internacional muestra que cuando las listas están encabezadas por mujeres hay mayor votación hacia éstas”, afirma la experta en derecho constitucional del Instituto de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile, María Cristina Escudero.
Si se llegaran a producir diferencias en la lista donde hay más personas de un género que otro se reemplazará el género de la persona elegida, es decir se cambia un hombre, por ejemplo, que había sido elegido por una mujer en esa lista, haciendo ajustes para que el resultado sea paritario.
En la primera sesión, se debe elegir al presidente y vicepresidente de la Convención, que ha de ser elegido por mayoría entre los 155 seleccionados que deberán votar también la conformación de las mesas.
Además, los constituyentes deberán ponerse de acuerdo en el reglamento de funcionamiento, que se estima llevará 2-3 meses de discusión, para definir cómo va a funcionar, cuántas comisiones va a tener, cómo van a votar, si habrá participación ciudadana, normas de ética y lo relacionado a conflictos de interés.
Los constituyentes tendrán 9 meses para elaborar una nueva Carta Magna, prorrogables durante 3 meses más.
Fuente: Ansa/24 France/ Gobierno de Chile.