No sin escollos y algunas críticas poco a poco se comienzó a dar respuesta a una realidad que existe en la costa argentina, el trabajo de los pescadores artesanales en semirígidos.
El municipio de General Pueyrredón otorgó los primeros permisos para efectuar la actividad a integrantes de la Asociación de Pescadores Artesanales de Mar del Plata, luego de una articulación entre distintos organismos del Estado, de escala municipal, provincial y nacional.
Para ello, con el objetivo de regularizar la actividad se creó el Registro de Pescadores Artesanales, los cuales deberán también participar de una capacitación dictada por Prefectura Naval Argentina para obtener la libreta de embarque.
Con estas autorizaciones se busca que de una actividad de subsistencia pasen a convertirse en trabajadores de la economía social y brindar sus productos a consumidores locales y también, a la industria pesquera nacional.
Los primeros en recibir los permisos para capturar variado costero dentro de las 3 primeras millas, fueron los tres semirrígidos “Rosana D”, “Rosana B y “El Rocío”, de la Cooperativa Fiskr que operará la flota, bajo la supervisión de Prefectura Naval, en la bajada de Cabo Corrientes.
El pescador Guillermo Morán de la Cooperativa consideró que “es un reconocimiento a un sector que ha estado postergado durante mucho tiempo”. Y explicó: “Somos una comunidad conformada por unas 40 embarcaciones que integramos unas 300 familias. Ahora podremos pescar corvina, pescadilla y algo de cornalito con red de cerco o medio mundo”.
El primer paso fue dado, ahora otros titulares de gomones semirrígidos deberán cumplir con los requisitos del registro y las solicitudes de Prefectura para lograr formalizar.
Los de la Banquina Chica también necesitan respuestas
Por su parte, los ´pescadores de la Sociedad de Patrones y la Cámara de Embarcaciones de Ría cuestionan los distintos criterios utilizados para la seguridad de las embarcaciones debido a que a ellos les exigen el uso de la doble balsa balsas, el sistema de posicionamiento satelital y trajes térmicos, que muchas veces no pueden cumplir por inconvenientes económicos.
Descendientes de los fundadores de la pesca comercial en la Argentina, con tan solo más de una docena de barcos, solicitan preocupados respaldo de las autoridades para la continuidad y desarrollo de su trabajo.
Tradición en la pesca artesanal Barcos de variado costero