Santiago Vidal es artista plástico e ilustrador, y durante la Pandemia tuvo la idea del pintar sobre billetes de Australes que había guardado por treinta años.
Ver retratos de deportistas, cómo Maradona o de artistas como Charly García, Gustavo Cerati y Luis Alberto Spinetta, quizás sea algo común o frecuente. Son o fueron estrellas cada uno de ellos en sus ámbitos. Lo que probablemente no sea algo usual es que esos retratos estén realizados sobre billetes de Australes guardados por treinta años.
Esta idea fue llevada a la práctica por Santiago Vidal, artista plástico e ilustrador, durante la pandemia. “Tenía cerca de trescientos billetes viejos de Australes. Me acuerdo de juntarlos porque iban perdiendo valor y prefería quedármelos. Así es que los guardé durante más de treinta años. En la pandemia, encerrado en casa y sin nada que hacer, empecé a pintar en telas que guardaba de la fábrica de mi Viejo. Fue larga la pandemia y me quedé sin telas enseguida. Y ahí se me ocurrió la idea de retratar sobre los viejos Australes a personas que habían marcado esa época”, explica en diálogo con “El Ágora”.

Vidal, que comenzó a dibujar de chico copiando a ilustradores de cómics, le da un lugar fundamental a la música, y la reconoce como una de sus principales fuentes de inspiración.
P-¿En qué momento y cómo comenzaste a ilustrar?
R-Creo que desde siempre, pero a principios de la adolescencia, mientras escuchaba música me pasaba horas y horas dibujando tapas de vinilos, personajes de películas, cómics o copiando a otros artistas que me gustaban.
P-¿Qué te inspira a ilustrar?
R-Me inspira principalmente la música. Es una comunión que tengo con pintar. En la música que escucho prácticamente todo el día es donde busco rendir un pequeño homenaje retratando a algunos de los artistas que más admiro. El cine y los cómics también. Pero es la música la que más me marcó.
P- ¿Cuánto tiempo te lleva una ilustración de un rostro?
R- Es muy variable el tiempo que tardo en encontrar a la persona que quiero retratar. Hay retratos que salen enseguida u otros que los duermo durante mucho tiempo. Tengo muchos trabajos dando vueltas. Voy y vengo y por ahí un día nos encontramos y sale. Una vez que lo tengo bocetado y le doy el Ok, tardo de 7 a 15 días en un retrato de 1 metro x 1 metro más o menos.

P-Algunas de tus ilustraciones están realizadas sobre billetes. ¿Cómo surge esa iniciativa? ¿Por qué?
R- La historia de los billetes es que yo tenía como trescientos billetes viejos de Australes. Me acuerdo de juntarlos porque iban perdiendo valor y prefería quedármelos. Así es que terminé con los billetes de diferentes valores que guardé durante más de treinta años.En la pandemia, encerrado en casa y sin nada que hacer, empecé a pintar en telas que guardaba de la fábrica de mi Viejo. Fue larga la pandemia y me quedé sin telas enseguida. Y ahí se me ocurrió la idea de retratar sobre los viejos Australes a personas que habían marcado esa época. Cerati fue el primero. También retraté a Diego(Maradona), “Charly” (García) y a Luis (Spinetta).
P-¿Alguna vez pudiste hacerle llegar alguna de tus ilustraciones a los personajes famosos retratados?
R-Algunas veces los he “taggeado” en una publicación. Sé que el retrato que hice de “Goyo” (Degano) de “Bandalos Chinos” era para regalárselo a él.
P-¿Qué significa para vos ilustrar y pintar?
R-Yo siempre trabajo escuchando música. Eso no lo negocio. De chico dibujaba en la mesa del living escuchando música. Es mi mundo. Es donde puedo pasar horas y horas sin darme cuenta. Pintar para mí es felicidad, es libertad.

P-¿Cuáles son tus referentes artísticos?
R-Referentes tengo millones. De toda expresión artística. Empecé copiando a ilustradores de cómics. Me acuerdo que íbamos con mi amigo Tiano, con quien compartimoseste amor por el arte desde que éramos muy niños, a Retiro donde comprábamos las revistas “Cimoc” y “Zona 84” que venían de España. Moebius (Jean Giraud) y Richard Coben –historietistas- también lo son. Después descubrí el “Surrealismo” y lo mezclé con el Rock sinfónico. Cuando terminé el colegio me puse a estudiar dirección de arte publicitario y ahí adopté a cultura popular para expresarme. Y Warhol fue la puerta.
Por último, Santiago reconoce que “Nunca pinté un mural, aunque me gustaría”. Y agrega que “la obra más grande que pinté fue de 3 metros x 1, 50 metros y la disfruté mucho”. Pueden encontrar parte de su trabajo en su cuenta de Instagram: “santiagovidal72”.