“No hay vacuna, no hay antibióticos. Es tu cuerpo contra el virus”, detalló el director técnico Luis Blanco al explicar la experiencia de ser un enfermo recuperado de coronavirus en el primer encuentro virtual organizado por El Ágora Comunidad.
Blanco participó junto al médico y decano del departamento de Salud de la Universidad Nacional de Avellaneda (Undav), Oscar Fariña y la estudiante de filosofía y letras, Ayelen García que es paciente oncológica y está colaborando con la campaña de donación de sangre.
Con casi dos horas de reunión especialistas, periodistas y vecinos analizaron sobre cómo se encuentra la Argentina frente a la pandemia del covid-19 y cuáles son las acciones para evitar su propagación.
Como sanitarista, Fariña comparte el criterio del Ministerio de Salud de la Nación y de la Provincia de Buenos Aires sobre el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio en el AMBA porque “el pico se va dando con cierta estabilidad. De acuerdo al comportamiento social en capital y el conurbano, que es donde se producen más del 80 por ciento de los casos, vamos a tener que continuar con las medidas de aislamiento y el autocuidado”.
“No es un capricho que se plantee el aislamiento de las persona sino que hasta que no haya una vacuna es la única estrategia potente para no infectarse”, aclaró el Decano de la Undav. Y aclaró que “vemos que el contagio de jóvenes y de niños es más frecuente en Latinoamérica que lo que sucedió en Europa, por lo tanto tenemos que cuidar a toda la población”.
Para el decano de la UNDAV “hay que ir resolviendo la apertura de las actividades de acuerdo al resultado, no hay que tener temor de ir para atrás con una medida cuando vemos que se reproducen los casos”.
El académico expuso un relevamiento de enfermos de coronavirus que hizo el Hospital Fiorito de Avellaneda sobre 80 pacientes, 16 eran mayores de 65 años. “En general el virus está circulando en todos aquellos que salen a trabajar, que están en la calle y son de un promedio de 35 a 50 años. El sector de edad de arriba de los 65 está cumpliendo con la cuarentena y por eso baja su tasa de infección”, sostuvo el profesional.
Para Fariña “la limpieza de las manos, de los elementos que nos rodean y la incorporación del tapaboca para evitar contagiar al vecino por si somos asintomáticos, son las medidas personales más importantes. Además de cambiar el hábito de tocarnos permanentemente los ojos, la nariz y la boca”.
Otra rutina que aportó el deportólogo es tomar sorbos de agua cada 15 o 20 minutos porque si el germen se aloja en las fauces podría pasar al aparato digestivo y no al sistema respiratorio.
En primera persona
Blanco un argentino residente en Málaga, oriundo de Lanús y hombre del fútbol, es ctualmente Técnico de Mons Calpe Sporting Club de Gibraltar en la Premier Ligue. Es uno de los recuperados de covid-19 y dio un fuerte testimonio de su experiencia en el encuentro virtural.
Según el Técnico su contagio “fue atípico porque ninguno del plantel profesional, cuando se paró la liga, se contagió ni el cuerpo técnico ni los dirigentes”. Consultado dónde se infectó dijo que todavía no está seguro porque “fui dos veces al supermercado con el barbijo y guantes. Me higienicé y no solo las manos sino las cosas que traía”.
“De repente empecé a tener mucha fiebre, como no me bajaba el director deportivo me sugirió hacer un test que me tardó 3 días y medio el resultado. Esa espera fue terrible porque la fiebre no cesaba. Entonces pedimos una ambulancia para que me trasladará a un hospital”, detalló el futbolista.
Con el resultado positivo Blanco apenas pudo subir a la ambulancia, producto de un cuadro de neumonía severa, recordó que “no podía dar un paso, perdía el oxigeno, me era difícil caminar. Me fue muy difícil porque no me ayudaron los de la ambulancia por miedo a contagiarse”.
“En el hospital me aislaron y ya no me acuerdo más nada. Aparecí en terapia intensiva, había estado en coma seis días, me habían canalizado. Estuve luchando contra este bicho, no hay vacuna no hay antibióticos. Es tu cuerpo contra el virus”, aclaró el ex jugador de Boca.
“En España hay 32 mil muertos, en la Argentina para mi no llegó el coronavirus. Sino se toma la dimensión es imparable, sentenció el técnico del Ascenso y aclaró que “Europa no estaba en condiciones de poder recibir una pandemia. Casi 5000 de los fallecidos son médicos y enfermeros”.
“Vi en un solo día fallecer 15 personas dentro de la terapia. Yo lloraba porque me quería ir de ahí tenía miedo que me pasará lo mismo”, relató Blanco y contó que cuando tuvo conciencia notó que a pesar de ser de masa muscular grande “había perdido 12 kilos y me había pasado un camión por encima”.
Solidaridad
En plena cuarentena la donación de sangre sigue siendo fundamental para enfrentar diferentes patologías y además para la aplicación de plasma en enfermos de covid-19.
Otro testimonio presentado fue el de Ayelen García, estudiante del Profesorado de Lengua y Literatura, y de la Licenciatura en Artes Visuales en Avellaneda que tiene cáncer de ovario y un tromboembolismo pulmonar le afectó el corazón.
Ya lleva realizadas tres transfusiones de sangre, dos de glóbulos rojos y una de plaquetas, la cual requirió de siete donantes.
García ayuda para crear conciencia de la importancia de la donación de sangre y repite para que se entienda la necesidad que su vida “depende de un donante”, y anhela que “llegue el día que no haya que pedir más dadores de sangre”.
“Es duro estar enfermo en este nuevo mundo. Es por eso que me interesa transmitir que mi vida y la de muchos que nos encontramos en este contexto de cuarentena, depende de la conciencia y solidaridad del otro”, reflexionó.
“Como sociedad debemos provechar a estar agradecidos con el personal de la salud que están velando por nosotros” y en particular lo hizo extensivo a la médica Liliana Calderón del Hospital Argerich que estaba en la reunión online.

Lo que comparten los expositores es la importancia de comprender que hay una situación extraordinaria y que se debe ser socialmente responsables.
“El tema es llegar con la menor cantidad de casos hasta que aparezca el elemento que nos genere los anticuerpos. La estrategia de contagio en manada como hizo Inglaterra ya vimos que ha fracasado, lo mismo pasa en Brasil y en Estados Unidos”, remarcó el médico.
En la Argentina “el mes de junio y principio de julio que es el momento en que todos los años se presenta el pico de las enfermedades respiratorias”, es por ello debemos intentar transcurrir este tiempo con una tendencia contenida.
Por su parte, Blanco explicó que “tomé conciencia que es una guerra sin bala y sin ver al enemigo, y la única manera es quedándose en la casa. Sino corres el riesgo de contraerlo y contagiarlo. Hay que tener respeto y no lo subestimarlo”.
Al respecto, en las reflexiones finales Garcia reconoció que “es complejo lo que estamos viviendo porque no es solo ocurre en Buenos Aires, sino es el mundo. No es lo mismo estar enfermos en el mundo que conocíamos que en este nuevo que se está formando”.
Con una mirada de faros largos Fariña puntualizó que “nunca en el mundo hubo 120 centros científicos investigando una vacuna”, y destacó dando una respuesta esperanzadora que “se está buscando la solución y se va a dar en los términos de los próximos meses”.
