Fueron trasladados tres ejemplares de guacamayos que habitaban en un domicilio particular en la localidad bonaerense de Zárate a un santuario entrerriano por personal del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, a través de su Brigada de Control Ambiental (BCA).
Una mujer entregó a la BCA de manera voluntaria un guacamayo azul (Anodorhynchus hyacinthinus), uno rojo (Ara chloropterus) y otro arlequín (de la descendencia de Ara ararauna y Ara chloroptera). A pesar de establecer un vínculo afectivo con ellos, la vecina de Zárate reconoció que por tratarse de animales exóticos tienen necesidades diferentes a las de las mascotas convencionales, como lo son un perro o un gato, y admitió que los guacamayos que cuidaba en su domicilio merecen tener una nueva oportunidad para vivir en mayor contacto con la naturaleza.
Al realizar la entrega voluntaria pidió a la ciudadanía “no fomentar el comercio ilegal de la fauna silvestre” y añadió que “este tipo de animales no son para jugar. Necesitan experimentar lo más cercano a la libertad que ellos puedan tener, ya que son especies exóticas”.

La Brigada de Control Ambiental recibió y trasladó a los tres guacamayos al santuario Tekove Mymba, que en guaraní significa “vida animal”. Dicho establecimiento no está abierto al público para preservar a los animales del estrés y permitirles que vivan de una manera más natural, similar a como lo harían en su estado salvaje. Ahora los ejemplares comienzan a aclimatarse a su nuevo hábitat, con altos estándares de bienestar animal, acondicionado para ellos con calefacción por paneles eléctricos y un sector externo.
Al llegar al lugar, los agentes de la BCA fueron recibidos por personal de la mencionada fundación, ubicada en Colón, Entre Ríos, y comprometida con la preservación del ambiente.
