La lechería no da pie con bola. Ante la caída en el precio internacional de la leche en polvo, que pasó de US$ 5 mil la tonelada a US$ 2 mil, es fácil entender que el negocio de la exportación cayó por su propio peso. Hoy dejó de ser competitiva la industria para vender al exterior, y como resultado las usinas se llenan de leche. Entrando en la estacional suba de mayor producción primaveral, siguen los problemas. Para mostrar las dificultades de la cadena, esta semana hubo una reunión de la Mesa Nacional Lechera, a la que varias entidades han dejado de adherir por considerar que sólo se sigue la política oficial. La reunión se realizó en el Salón Eva Perón del Senado de la Nación. Productores pidieron el miércoles pasado a los senadores nacionales que se declare la emergencia para el sector lechero frente a la crisis que enfrenta esta actividad, que vio “desaparecer un tambo por día desde 2002, según expresaron desde la Mesa Nacional de Lechería (MNL). Al respecto, el analista económico de la Sociedad Rural Argentina Ezequiel de Freijo aclaró que “con un precio internacional que presenta una fuerte caída, a US$ 1.800 o US$ 2 mil (la tonelada de leche en polvo) desde los US$ 5 mil que exhibió en enero de 2014, esto se agrava con una macroeconomía que distorsiona los precios relativos y con políticas muy malas para el sector”. “Esto llevó al sector tambero a estar hoy descapitalizado y endeudado”, una difícil situación para enfrentar la crisis, manifestó De Freijo.
La coordinadora de la comisión láctea de Carbap, Andrea Passerini, detalló que “los productores lácteos estamos enfrentando una primavera en la que no tenemos recursos ni financiamiento para poder confeccionar las reservas que hacen que el tambo pueda seguir funcionando”.
Frente a la crisis de los precios a nivel internacional en la actividad láctea, a los productores argentinos se les complicó más el panorama, según la coordinadora de la comisión de lechería porque “desde mayo hasta agosto el precio promedio del productor ha bajado el 20%, y un 14% a nivel interanual”. Y agregó: “Se agravó también porque en regiones de Santa Fe y Trenque Lauquen de la provincia de Buenos Aires las usinas y las pymes empiezan a limitar la cantidad de litros recibidos por tambo”. Por su parte, el presidente de Carbap, Horacio Salaverri, consideró que es necesario plantear “una política clara orientada a la exportación y a beneficiar el consumo interno”, porque “si no podemos insertarnos en el mundo con nuestra producción, la proyección para la actividad es muy mala”. En la reunión, Rodríguez Saá confirmó que hay un borrador para declarar en emergencia las economías productivas y poder tomar medidas para eliminar los ROE y sacar el impuesto al sector.
Además, indicó que la idea es suscribir la iniciativa con los senadores de todos los partidos políticos el 10 de octubre, dos o tres semanas antes de las elecciones, con un sentido político, y que permita ir encontrando los consensos necesarios del diálogo para construir las políticas comunes. Destacó que “si logramos sintetizar los 64 proyectos existentes donde se incorporen toda las producciones de las economías regionales, eso podría dar una linda señal de acuerdo”.
Estuvieron presentes los legisladores del Interbloque Parlamentario Federal Adolfo Rodríguez Saá, quien encabezó la reunión junto con los senadores Guillermo Pereyra, Roberto Basualdo y Liliana Negre de Alonso. Asimismo, se sumó al encuentro convocado por Compromiso Federal, el senador del PRO Alfredo de Angeli.