En época de crisis se evita todo tipo de gastos que los usuarios creen que no son necesarios, pero no siempre es así. En el caso de los automotores, el mantenimiento preventivo o de rutina según los kilometrajes es esencial para alargar su durabilidad. En caso que exista algún desperfecto, encontrarlo a tiempo permite evitar arreglos de urgencia, accidentes o el deterioro general con sus consecuencias económicas al momento de repararlo.
El tener un automóvil, ya sea de uso personal o laboral, implica el mantenimiento periódico. En caso de tener un auto 0km es conveniente seguir las indicaciones que dan desde la concesionaria y escuchar al mecánico de confianza para evitar problemas cuando se utiliza el vehículo. Desde la Federación Argentina de Asociaciones de Talleres Reparaciones de Automotores y Afines (Faatra) recomiendan el mantenimiento a través del personal capacitando y siguiendo las recomendaciones del fabricante.
Detectar a tiempo posibles inconvenientes y saber a qué alertas se debe estar atento para ir al taller mecánico en el momento idóneo, de esta manera, se logra evitar el deterioro progresivo. “Se recomienda realizar en tiempo y forma las revisiones del automotor y seguir las recomendaciones de uso apropiado del vehículo. Saber las especificaciones detalladas en el manual, hace que su rendimiento sea mayor, y la vida útil se alargue”, sugiere el presidente de Faatra, Salvador Lupo, quienes bridarán charlas y capacitaciones en la próxima edición de Automechanika Buenos Aires sobre estas temáticas de importancia para los mecánicos y talleristas automotrices.
Hoy en día hay más vehículos con cajas automáticas, esto no significa que hay que dejar de lado su mantenimiento, de la misma manera que las cajas manuales, las cajas automáticas tienen mantenimiento, con un buen cuidado, mantenimiento y limpieza de estas cajas se garantiza y se alarga su vida útil. Este tipo de cajas poseen un fluido especifico denominado ATF o Automatic Transmission Fluid, este compuesto responde de forma exacta a las necesidades que la caja tiene. Se recomienda su reemplazo total a partir de los 80.000km según el vehículo. Y así aumentar su vida útil.
Para lograr el mantenimiento preventivo vehicular de manera correcta, la Federación resalta los siguientes consejos que permiten aumentar la vida útil del automóvil:
· Cambio de aceite y filtro del motor: Se recomienda realizar el cambio de aceite cada 10.000km o pasado un año. Es fundamental hacerlo regularmente según las especificaciones del fabricante del automóvil.
· Revisión y cambio de fluidos: De manera periódica y en particular antes de viajar es importante revisar el aceite y otros fluidos como: refrigerante, líquido de frenos, de la dirección hidráulica y el líquido de transmisión de la caja automática. Es esencial mantenerlos en los niveles adecuados y en condiciones apropiadas para el funcionamiento seguro del vehículo.
· Inspección de neumáticos: Verificar de manera regular la presión de los neumáticos como indica el fabricante del automotor para evitar su desgaste anticipado o deformación. A su vez, se recomienda hacer una rotación cada 10.000 km.
· Frenos: Inspeccionar periódicamente el sistema de frenos, incluyendo las pastillas, discos, calipers y líquido de frenos. Los frenos desgastados o con problemas pueden llegar a comprometer la seguridad del vehículo, sus ocupantes y peatones. Estos deben ser reparados o reemplazados en su totalidad según el estado de los mismos.
· Sistema de suspensión y dirección: Verificar el estado de los amortiguadores, bujes, muelles y demás componentes de suspensión y dirección. Un sistema de suspensión en mal estado puede afectar la estabilidad y el manejo del vehículo.
· Filtros de aire y habitáculo: El filtro de aire debe cambiarse al mismo tiempo que se realiza el cambio de aceite. En el caso del filtro del habitáculo, se debe revisar periódicamente para garantizar la eficiencia y calidad del sistema de climatización.
· Sistema eléctrico y luces: La vida útil promedio de la batería es de tres a cinco años. Se debe verificar su estado, junto con el sistema de carga y las luces del vehículo para garantizar la visibilidad y el uso del vehículo en condiciones óptimas.
· Sistema de escape: Inspeccionar el sistema de escape en busca de fugas, daños o corrosión. En caso de estar deteriorado puede provocar emisiones nocivas y afectar el rendimiento del motor.
· Correa de distribución o cadena: En aquellos motores que tienen correa de distribución, es esencial seguir las recomendaciones del fabricante en cuanto a su sustitución. En vehículos con cadena de distribución, es importante verificar su estado y tensión.