La capacitadora del Taller del grupo de Hilados de Azul de lana artesanal, Marisa Martins propone un viaje al pasado para enseñar cómo nuestras criollas hilaban los vellones para luego tejer sus vestimentas y abrigos.
La lana que utilizan las alumnas de Martins proviene de las ovejas de la raza Corriedalle que los productores de la zona entregan embolsada en el campo. Para el teñido utilizan tintes naturales tomando vegetales propios del campo como la manzanilla, el cardo de castillos, el eucalipto, el ceibo, la cáscara de cebolla, entre otros.
Primer Paso: Material virgen
-Vellón
Del vellón de la oveja se debe seleccionar la de la zona del lomo, (descartar la lana de la zona de la barriga, patas), para comenzar con la limpieza de suciedades, como abrojos, cascarria, espinas y pasto.
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-Limpieza de puntas
Quitar las puntas quemadas y resecas cortándolas con la tijera.
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-Apertura de fibras
Separar con las manos las fibras. Despegando y alineando el material Además, hay que tener la precaución de retirar las impurezas más pequeñas.
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Segundo Paso: preparación de la mecha.
Tomar un grupo de fibras y estirarlas suavemente para formar una mecha.
Recomendación de Marisa: tratar el material con cariño y mucha paciencia.
Tercer Paso: Hilado
Seleccionada la lana se abre de tal manera que quede como una hebra espumante que luego se pasa por el uso o por la rueca, por este motivo el proceso de hilado es en su totalidad un procedimiento artesanal.
–A: Girar la rueca hacia la derecha
Ya en la rueca comenzar a hilar, girando el carretel hacia la derecha y unir la mecha a un hilo que se habrá colocado previamente en el carretel. Si ya habíamos hilado, hay que juntar la nueva mecha con la lana ya hilada, abriendo previamente ésta para unirla a las nuevas fibras, nunca se deben de hacer nudos.
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– B: Detalle del hilado
A medida que vamos hilando, estiramos las fibras, para lograr el grosor deseado, y un hilado parejo.
– C: Hilado completo
Hay que hilar hasta completar el primer carretel.
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– D: Primer ovillo
Retirar las correas de la rueca para facilitar el ovillado de la lana.
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– E: Hilado de la segunda hebra
Repetimos todos los pasos anteriores hasta lograr un segundo ovillo.
Cuarto Paso: Formación de la madeja
– Juntar las dos hebras
Con los dos ovillos ya realizados, proceder a unir para lograr un hilado de dos hebras, pasando las hebras nuevamente por la rueca pero haciendo girar el carretel en sentido contrario, hacia la izquierda.
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– Formación de la madeja
Una vez finalizado, procedemos a hacer la madeja.
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– Anudar la madeja
Es importante atar en seis lugares, para que durante el lavado no se enrede, las ataduras deben ser flojas para evitar que en esos lugares quede suciedad.
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Quinto Paso: Lavado
La lana se lava para sacarle todas las suciedades que puede tener. Una vez lavada, se decide si se deja con el color original o se tiñe (para el caso de la lana blanca, ya que los otros colores de lana solo pueden quedar en color natural).
Para el lavado, Martins sugiere sumergir la madeja en agua tibia sin jabón, varias veces cambiando el agua, luego con jabón neutro. “Es muy importante no aplicarle cambios bruscos de temperatura, para que la lana no se afieltre, si vemos que aún no se ha quitado toda la grasitud, repetimos el lavado con jabón. Si la lana no se utilizará para teñido, le agregamos en el último enjuague un suavizante”.
El procedimiento se repite tantas veces como sea necesario (cuando el agua quede totalmente limpia y la lana quede suave y limpia).
“Luego la secamos a la sombra en un lugar aireado”, aclara la capacitadora.
La lana de oveja hilada al ser lavada pierde unos 25 grs. cada 100 grs.
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Madeja ya seca.
-Producto terminado
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(Recuadro): La lana de oveja hilada en forma artesanal tiene la cualidad de no ceder, ni estirarse. No se deforma con el uso y no se destiñe.
Como toda prenda se debe de tener los cuidados mínimos para su larga duración. Es recomendable que la prenda sea lavada como una prenda fina con jabones neutros; y que si es guardada en invierno acordarse de colocar antipolillas.
Tips:
– Selección de la lana a hilar y escardado (limpieza separando la lana de la basura, cascarrea).
– Hilado.
– Lavado.
– Secado. (Material para la comercialización).
– Otras opciones:
– Teñir en distintos colores el material y venderlo para su tejido.
– Tejido manual (telar, a dos agujas, crochet), según la habilidad.
– Confección de prenda.
Para tener en cuenta:
Con la lana hilada en el uso o en la rueca, se hace otro trabajo para la lana de dos hebras muy diferente que la de una hebra; la lana se coloca en un carretel auxiliar y cuando se tiene dos carreteles completos se los vuelve a unir en el sentido contrario al que han sido hilados, teniendo al final uno solo de dos hebras. Para la lana de una hebra se saca del uso o rueca y se lava. Después se ovilla y se hacen madejas.
Fotos : Juan Carlos Martins