La Cámara de Diputados rechazó, con una mayoría especial de dos tercios, el veto presidencial a la Ley de Financiamiento para las Universidades Nacionales. También los bloques opositores lograron rechazar el veto a la Ley de Emergencia Pediátrica del Hospital Garrahan, aunque fue el capítulo universitario el que marcó el pulso político y social de la jornada. La decisión de la Cámara baja representa la primera gran derrota legislativa de Milei tras el traspié electoral en la provincia de Buenos Aires.
El veto al financiamiento universitario fue rechazado por 174 votos afirmativos contra 67 negativos, superando ampliamente el umbral constitucional para insistir con la ley. Antes, el veto al Hospital Garrahan había caído por 181 votos a 60. Ahora, ambas iniciativas deberán ser tratadas en el Senado, donde la oposición necesitará nuevamente reunir los dos tercios para lograr la promulgación definitiva.
La calle también votó
La sesión se desarrolló en un clima cargado de movilización social. Desde el mediodía, organizaciones estudiantiles, docentes, sindicatos, partidos políticos y vecinos acompañaron la discusión frente al Congreso. Las columnas, teñidas de banderas universitarias, hicieron sentir su reclamo contra el ajuste y la “motosierra” presidencial.
Al finalizar la votación universitaria, los pasillos de Diputados estallaron en cantos en defensa de la educación pública, un símbolo que trasciende la coyuntura y que coloca al sistema universitario en el centro de la disputa entre Gobierno y oposición.



