El asado, emblema indiscutido de la identidad argentina, dio un giro inesperado y se convirtió en protagonista de un desfile de moda en el club Excursionistas, en Bajo Belgrano. La propuesta, que unió tradición y vanguardia, fue impulsada por el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA) junto a la marca Revolver.
La experiencia no se limitó a la pasarela: a la par del desfile, los asistentes pudieron degustar diferentes cortes de carne en un marco cargado de aromas, fuego y humo, que transformó al asado en una verdadera performance estética y sensorial.


Moda, fuego y cultura
La alianza entre IPCVA y Revolver buscó resignificar lo argentino desde dos lenguajes distintos pero complementarios: el diseño y la gastronomía. En la pasarela, la ropa destacó la identidad local y los recursos naturales, mientras que en las parrillas, la carne argentina reafirmó su lugar como tradición y símbolo cultural.
Más allá de la originalidad, la propuesta logró lo que parecía imposible: acercar el ritual del asado a públicos jóvenes y urbanos, conectando con las nuevas tendencias de consumo y posicionando a la carne argentina como un ícono no solo de sabor, sino también de innovación cultural.
En definitiva, fue una iniciativa en la que moda y asado compartieron protagonismo, y donde el fuego no solo cocinó la carne, sino que encendió una nueva manera de mirar nuestras costumbres.