La cantante argentina Delfina Cheb residente en Estados Unidos presentó en vivo, su segundo disco en el escenario de Café Berlín y desplegó todo su arte y su empatía con el público, pero también su particular estilo de cantar y de decir el tango.
Aferrada en este momento a las letras de tangos clásicos que en su voz educada adquieren un plano diferente, rico en sonidos y cadencias que van más allá de este género musical que siempre desata sus pergaminos históricos.
A Delfina no le pesa esa circunstancia; las legendarias letras tangueras pasan por el tamiz de su voz y sus sentimientos y las convierte en otra propuesta musical y de interpretación que, sin duda alguna, rompe con cualquier estereotipo tanguero o con aquello que un espectador presupone que debe recibir de una cantante de tangos.
Lo que sucede en su voz y en su corazón, se vuelve tangible en un escenario. Ella lo hace simple: canta y no solo lo que siente y percibe, sino también se trasluce la necesidad de expresar historias propias y ajenas sobre estilos que toma prestadas cadencias milongueras y hasta cierto aire flamenco, tangos y hasta un costado de candombe asomó de tanto en tanto, en la noche de Café Berlín.
A través de esa destreza vocal cargada de expresividad casi sin límites, las canciones y los tangos adquieren una dimensión superlativa. Transita “callecitas sembradas de poesías” y por otras fronteras de paisajes barriales con el “silencio que hay en tu puerta” y hasta los dramáticos textos discepolianos, se tornan soportables en esa voz teñida de pasión por el canto.
Y es en ese punto al que concurren la melodía y la poesía, se halla una propuesta pura y sincera, cautivadora a la vez en el que la belleza y el arte van de la mano.
Con músicos invitados y la presencia “de lujo” de Guillermo Fernández, con el que cantó dos temas; también se sumó el pianista y cantor Pablo Grinjot; con ellos en el escenario, más el trío de guitarras que comandó Horacio Avilano.
En el disco que presenta junto al trío con Horacio Avilano y Luis Salinas, como invitado especial, explora el tango en un trabajo casi arqueológico cantando piezas de compositores que van desde Ignacio Corsini a Astor Piazzolla pasando por Sebastian Piana y Aníbal Troilo, entre otros.

En diálogo con El Ágora Delfina Cheb afirmó que “este disco es un proyecto personal que busca profundizar sobre una raíz urgente. Estudie estas canciones con el máximo respeto y dedicación porque considero a cada una de ellas un regalo y un registro imprescindible e infinito de nuestra amada Buenos Aires y del misterioso y temperamental Río de La Plata. Agradezco a Horacio Avilano y a Luis Salinas por enseñarme estas canciones que se volvieron tótems eternos de vivencias y aprendizaje. Este disco fue grabado en vivo en dos días en el genial y único Estudio ION que cuenta por si solo con un aire arcano y tanguero. La grabación fue un ritual de trabajo en equipo y amor por este repertorio que, como quiso Piazzolla será la música de los adoquines en el año 3000”.
– ¿Cómo llegaste a involucrarte con el tango; sobre todo con los clásicos?
Mi acercamiento al tango fue un volver a la música de siempre. A la música que sonaba en mi casa. Esa música vivía en mi era solo cuestión de reencontrarnos. Tuve también la suerte y el honor de poder trabajar con grandes maestros como Horacio Avilano, Javier limón y Luis Salinas que me fueron regalando canciones que son hoy mis más grandes tesoros.
– Cuando se aborda al tango clásico, el público por lo general espera un tipo de interpretación. Un estereotipo. ¿Pudiste desprenderte de ellos, y ofrecer otra forma?
Creo que existen los estereotipos y existe todo lo demás. Por suerte no tuve que luchar mucho contra los preconceptos que uno espera tener que enfrentar. El mundo del tango me ha recibido con los brazos y el corazón abierto y yo estoy intensamente agradecida por todas las personas hermosas que he conocido y todas las anécdotas que me continúa permitiendo esta hermosa comunidad.
-Con el tango y con los clásicos nunca está todo dicho o en este caso cantado. ¿Desde qué valores abordas esas historias?
Abordo las historias desde mi verdad. Desde lo que siento propio en las letras y en las melodías que existen en mi repertorio. Creo que la forma de encontrar lo propio es confiar en el poder de la empatía y de la conexión con lo ubicuo. Con lo que existe en el momento en el que surge el cante. Siempre habrá algo que decir si uno escucha atentamente al corazón.
-Pese a la distancia que ponen los años y el contexto social tan cambiante… ¿Crees que a las personas del Siglo XXI les pasa lo mismo que a las de mediados o principios del Siglo pasado?
Obviamente somos todos distintos. No importa cuando o donde nacimos. Pero insistió en que creo que el corazón es atemporal. Hay cosas que nos atraviesan como seres humanos. Hay letras que son infinitas. Y por suerte, muchas de ellas las tenemos en nuestro querido repertorio tanguero.
Delfina y sus canciones
Los temas incluidos en el álbum son: A Una Perla (Acena, LaRocca), Como dos Extraños (Laurenz, Contursi), Esquinas Porteñas (Piana, Manzi), Ventanita Florida (Delfino, Amadori), Cafetín de Buenos Aires (Mores, Santos Discepolo), Siempre se Vuelve a Buenos Aires (Piazzolla y Blazquez), Nada (Dames, Sanguinetti), Divina (Mora, De la Calle), No Aflojes (Maffia, Piana, Battistella), Garúa (Troilo, Cadicamo).
Los músicos que acompañan a Delfina en esta producción -y en su gira internacional- son Luis Salinas, aclamado guitarrista de música de raíz argentina, Horacio Avilano, Hernán Fredes y Hernán Mastromarini.
A los 18 años de edad se ganó una beca para realizar su doble licenciatura en Composición de Jazz y Performance vocal en la prestigiosa Berklee College Of Music.
Allí exploró la música folk de distintos lugares del mundo al igual que el jazz. Estudió y participó en Clases Magistrales con grandes músicos tales como Kenny Werner, Francisco Mela, Luciana Souza, Kurt Elling, Dominique Eade y Toninho Horta. En 2020 estrenó su primer disco Doce Milongas de Amor y un Tango Desesperado producido por Javier Limón. En 2021 se graduó con una maestría en Improvisación Contemporánea del New England Conservatory y es ahora candidata a Doctora en Musicología y música contemporánea en la misma institución.