Comenzó el mes de brindis y celebraciones especiales para la industria vitivinícola argentina, ya que cada 24 de noviembre -como sucede desde 2010- se celebra el Día del Vino Argentino cuando fue declarado por decreto presidencial como Bebida Nacional. Esta celebración tiene como objetivo resaltar el valor de la vitivinicultura y el vino, su conexión con nuestra tierra y su valor cultural como parte de la identidad nacional argentina. Además, en 2013 ese decreto inicial fue ratificado por una ley con unanimidad de votos en el Congreso Nacional, en la que se reconoce al vino como un alimento representativo de nuestra cultura que forma parte de nuestra dieta.
Este año, las actividades se combinarán entre presencial y online, incluyendo ferias de vino artesanal, gastronomía, enoturismo, presentaciones artísticas, obras de teatro, música, danza y concursos de coctelería. Además, San Juan realizará una actividad destinada especialmente a los jóvenes, que incluirá una batalla de los gallos y pistas de skate.
“El 24 de noviembre es la celebración del Vino Argentino Bebida Nacional, una exitosa construcción institucional asociada a la cultura y la historia de los argentinos que lleva más de diez años de articulación constante entre el sector privado y el público, tanto a nivel nacional, como provincial y municipal”, sostuvo el presidente de la Coviar, José Alberto Zuccardi.
Los festejos también trascenderán las fronteras, ya que Wines of Argentinacon la Embajada Argentina en Canadá y el Consulado General de Argentina en Toronto, organizaron un seminario virtual que incluirá una degustación de vinos argentinos, para acompañar el recorrido por los temas abordados. Cada participante recibirá una botella de cada vino para la instancia de degustación.
¿Qué significa que el Vino sea Bebida Nacional?
El vino es parte de la cultura argentina, como el asado y el tango. Con el Malbec a la cabeza, también se transformó en un embajador de nuestro país en todo el mundo. Por lo tanto, el vino ya era considerado por los argentinos la Bebida Nacional desde mucho antes que se sancionara el decreto que legalizó su denominación.
Pero más allá de su importancia cultural y turística, Argentina es el país vitivinícola más importante de América del Sur y uno de los 10 más relevantes a nivel internacional. Del sur al norte, desde la Patagonia hasta Jujuy, las más de 230.000 hectáreas de viñedos convierten a nuestro país en uno de los más ricos en su diversidad de terruños y estilos de vinos. Anualmente se consumen 22 litros por persona en Argentina.
Además, la industria vitivinícola es una de las actividades más importantes para las economías de las provincias productoras, ya que genera un alto valor agregado en origen y cientos de miles de puestos de trabajo. Y si bien esta actividad conforma una de las 10 principales cadenas exportadoras argentinas, 7 de cada 10 litros de vino que se elaboran en el país se consumen dentro del territorio nacional.

El Vino Argentino, Bebida Nacional
La institución del vino como Bebida Nacional (la primera en el mundo en ser declarada por ley) representa múltiples beneficios directos al producto vino, como así también beneficios indirectos a toda la cadena y a todos los productos de esta industria. Así, desde la difusión de las características culturales que implica la producción, elaboración y consumo de vino argentino y sus tradiciones; la promoción del desarrollo de las economías regionales a partir de acciones relacionadas con actividades de servicios vinculadas al sector vitivinícola; la presentación de los numerosos, diversos y maravillosos paisajes vitivinícolas de nuestro territorio nacional; o la revalorización de los recursos humanos asociados a la producción desde el viñedo hasta la comercialización, entre otros.
Para este año están previstos una serie de festejos en distintos puntos del país y algunos en el exterior.