El Túnel de La Línea, el más largo de América Latina y que atraviesa la Cordillera Central de los Andes, fue inaugurado este viernes por el presidente colombiano, Iván Duque, quien destacó que la obra, la más importante de la ingeniería nacional, es “el sueño de un país, de más de un siglo”.
La obra, que tiene una longitud de 8.650 metros, es la principal de un complejo vial que comunica a las localidades de Cajamarca, en el departamento del Tolima, con Calarcá, en el Quindío, lo que disminuirá en media en 50 minutos el tiempo de viaje entre el suroeste y el centro del país, y será crucial para agilizar el transporte de carga desde el puerto de Buenaventura, en el Pacífico.
Filas interminables, horas dentro de los autos, incertidumbre y peligro en la vía era el panorama que, por muchos años, tuvieron que padecer transportadores, pasajeros, turistas y habitantes de ambos territorios por las malas condiciones de la vía, a lo que se sumaba la angostura de la misma, que representaba un riesgo mortal para quien osara intentar hacer un sobrepaso.
El nuevo Túnel de la Línea, que conecta los municipios de Calarcá (Quindío) y Cajamarca (Tolima) contó con una inversión superior a $1 billón atraviesan la compleja Cordillera Central, se convierte en el túnel carretero más largo de América Latina y en la obra más representativa de la ingeniería colombiana.
Para lograr este objetivo, el Instituto Nacional de Vías (Invías), entidad adscrita al Ministerio de Transporte, desarrolló un minucioso y disciplinado plan estructurado por fases para determinar las obras a ejecutar y dio como resultado una doble calzada de 30 kilómetros, con 31 viaductos, 25 túneles y 3 intercambiadores viales para atravesar la Cordillera Central.
Las inversiones totales del proyecto ‘Cruce de la Cordillera Central’ ascienden a $2,9 billones.
Duque explicó que durante casi un siglo se habló de salvar el difícil paso por la Cordillera Central para agilizar el transporte entre el centro y el suroeste del país, y llegó a afirmarse que esa obra era inviable por condiciones geológicas, y agregó que “fíjense lo que son las cosas: el proyecto que se entrega se convierte en el túnel más largo de América Latina y el Caribe. Y se entrega en medio de una situación que es difícil, como es esta pandemia”, manifestó.
Para lograr este objetivo, el Instituto Nacional de Vías (Invías), entidad adscrita al Ministerio de Transporte, desarrolló un minucioso y disciplinado plan estructurado por fases para determinar las obras a ejecutar y dio como resultado una doble calzada de 30 kilómetros entre Cajamarca y Calarcá, con 31 viaductos, 25 túneles y 3 intercambiadores viales para atravesar la cordillera Central
