Sobre las medidas tomadas por el Banco Central de la República Argentina respecto al dólar se pronunciaron distintos dirigentes rurales y analizaron el impacto en las economías regionales o producciones de menor escala.
Para Coninagro “no son las mejores, hasta se puede decir son peligrosas porque contribuyen a la gran crisis de confianza que existe. No es verdad que no hay dólares: los hay pero fuera del sistema y hay que generar incentivos para que ingresen, mantener el intervencionismo cambiario no generará ingreso de dólares al sistema”. Y agregan que “el mayor cepo puede reducir algo la demanda de dólares “ahorro” oficiales pero no genera ingreso de dólares al sistema”.
El presidente de la entidad rural, Carlos Iannizzotto sostuvo que: “no está de acuerdo con el atraso cambiario y se necesita tener reglas claras a favor de la producción y de la exportación. Las medidas anunciadas pueden aumentar la brecha cambiaria y esto genera un desaliento, debilita la confianza, con mayor lugar a la especulación y no a la producción”.
Al respecto, el presidente de Federación Agraria Argentina, Carlos Achetoni, considero que “estamos ante medidas pensando en el cortísimo plazo, que no solucionan problemas de fondo (inflación, falta de competitividad). Cada vez que en el pasado hemos tenido restricciones sobre el dólar los problemas se han apilado y aumentado en lugar de resolverse. Esto en un contexto de inflación alta, aunque algo menor que en 2019, no hace más que dilatar los problemas cambiarios al futuro, pero al no resolverlos, afecta por supuesto al presente por incertidumbre y la falta de confianza. Lamentamos además que una vez más las cuestiones cambiarias y financieras estén por sobre un debate sincero sobre la economía real: como producir más,como generar más empleo, como formalizar la economía, como exportar más, como recuperarnos de la difícil situación en que estamos”.
“Entonces, aunque en principio no se trata de una medida sobre nuestro sector, no hay dudas de que va a tener consecuencias profundas para nosotros, los pequeños y medianos productores, que tenemos muchos de nuestros gastos en insumos dolarizados y luego le vendemos mayormente al sector interno, que está tremendamente castigado por la crisis económica que se profundizó con los efectos del covid-19”, dijo el federado, y agregó que “se sigue transitando el camino restrictivo apelando a los cepos y a las prohibiciones directas o indirectas, que siempre han fracasado. La aceleración en el precio del dólar real y la inestabilidad que se constata permanentemente, y las consecuentes restricciones, son producto de la gran incertidumbre que existe en relación con el rumbo del país y la falta de certezas y de seguridades”.