El Gobierno Nacional formalizó esta mañana, a través del Boletín Oficial, el proceso licitatorio para adquirir 43 trenes completamente nuevos, técnicamente denominados Unidades Múltiples Diésel (DMU). La operación será realizada mediante una contratación directa por compulsa abreviada a cargo de Trenes Argentinos Operaciones y representa una inversión estratégica estimada en 300 millones de dólares.
La decisión marca un punto de inflexión para el sistema ferroviario del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), que transporta diariamente a 1.3 millones de personas y no incorporaba nuevas formaciones desde 2015. El paquete incluye 150 coches de pasajeros, insumos esenciales, componentes para un mantenimiento inicial de tres años y toda la documentación técnica necesaria para su puesta en funcionamiento.
Las nuevas unidades serán destinadas a las líneas Roca, Mitre, Sarmiento, San Martín y Belgrano Sur. Su incorporación permitirá reemplazar material rodante que supera los 50 años de servicio, mejorar la confiabilidad operativa y elevar los estándares de seguridad.
Esta medida se integra a un programa de inversión más amplio que contempla la compra de 3 locomotoras diésel-eléctricas por 7 millones de dólares para la Línea San Martín —cuyo arribo está previsto para enero de 2026— y la asignación de 119 millones de dólares para adquirir repuestos ferroviarios críticos, fundamentales para los mantenimientos pesados de las líneas Mitre, Sarmiento y Roca. Este tipo de insumos no se adquiría desde hacía nueve años.
Beneficios para el usuario y eficiencia en recursos
La incorporación de trenes “cero kilómetro” tendrá un impacto inmediato en la experiencia de viaje:
- Mejora de frecuencias, gracias a una mayor velocidad de circulación.
- Reducción de tiempos de viaje en los recorridos completos.
- Mayor confort y diseño, con mejores condiciones de ascenso y descenso y una calidad superior en el viaje.
En términos operativos y ambientales, las nuevas unidades permitirán reducir el consumo de combustible en casi un 50% respecto de las locomotoras diésel actuales, generando un ahorro significativo tanto para el sistema como para el medio ambiente.
La iniciativa se enmarca en el plan de acción del DNU 525/24, elaborado por la Secretaría de Transporte del Ministerio de Economía. Además de la compra de material rodante, incluye obras de infraestructura para reforzar la seguridad operacional, la optimización del gasto, un aumento del 75% en las capacitaciones para el personal ferroviario y la simplificación de normas técnicas.
El objetivo final es lograr un sistema ferroviario más seguro, eficiente y moderno, capaz de responder a las necesidades actuales y futuras de los pasajeros del AMBA.




