Maldita, la pieza teatral cuya autoría pertenece a Sandra Fransen pone en jaque los mandatos femeninos de una sociedad que en la obra se desarrolla en un ambiente campestre, pero que puede traspolarse a cualquier estructura social, en donde la rigidez y la casi nula maniobrabilidad de la mujer, es algo naturalizado.
Sin embargo, el elaborado texto de Fransen define las escenas con palabras y frases que obliga al espectador a prestar atención a las palabras no dichas, a lo que se sabe y no debe decirse, a situaciones ya conocidas y que no hace falta explicarlo todo.
En Maldita aparecen los caminos sin salida y que solo lo clandestino y lo prohibido. Aquello que se sabe y que en secreto se acepta, cuando los intereses propios y ajenos tienen peso y presencia suficientes, como para torcer el destino, que de previsto, se transforma en un hecho inesperado e increíble que se desliga de los mandatos.

Miradas, gestos, palabras sugerentes, muestran a lo largo de la obra, cómo los valores predominantes, chocan de frente contra una dignidad añorada y necesaria y una serie de emociones que no termina de asomarse, pero cuando lo hacen, son incontenibles.
Toda esta historia se sostiene con actuaciones sólidas y convincentes, sobre todo de la actriz Antonia Bengoechea cuya presencia y juventud, asoma con una madurez interpretativa que sorprende gratamente; acompañan a la misma altura Vando Villamil y Félix Santamaría.
La dirección de Indio Romero, logra ordenar el texto de Fransen y poner en marcha la acción teatral. Una particularidad para destacar es la música elegida: Chopin: Preludio en Mi menor, Opus 28, Número 4 y recortes de experimentos sonoros de Karl Schiske en la University of Music and Performing Arts Vienna, sumados a pasajes musicales de Arnold Schönberg. Una banda de sonido que logra una profundidad al tema que se desarrolla en la obra.
Lo hicieron posible
Elenco: Vando Villamil, Antonia Bengoechea, Félix Santamaría
Diseño de escenografía y vestuario: Marcelo Valiente
Diseño de iluminación: Agnese Lozupone
Diseño gráfico: Violeta Santamaría
Fotografía: Alejandro Calderone Caviglia
Realización de escenografía: Augusto Latorraca
Asistente de vestuario: Laura Spampinato
Maquillaje y peinado: Beatriz Abrigo
Sonido y asistente de escenario: Joaquín Segade
Prensa y difusión: Carolina Alfonso
Director asociado: Sebastián Vigo