En una comunicación de prensa los gobiernos de Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay pidieron este domingo a Argentina que suspenda el cobro de un peaje que consideran “unilateral” y “arbitrario” en el tramo norte de la hidrovía Paraguay-Paraná. Además, solicitan que se garantice la libre navegación y tránsito por ese corredor natural que tiene salida al océano Atlántico.
Para los cuatro países limítrofes las medidas impuestas por Argentina restringen la navegación en la hidrovía y sostienen que el peaje de USD1,47 por embarcación dispuesto fue establecido “al margen del Acuerdo de Santa Cruz de la Sierra y otras disposiciones reglamentarias internacionales vigentes”.
Además el canciller de Paraguay, Rubén Ramírez, informó que acudirán al Tribunal Permanente de Revisión (TPR) del Mercado Común del Sur (Mercosur) por la retención de un convoy de diez barcazas en un tramo del corredor fluvial por parte de la Justicia Federal argentina a la espera que la naviera Mercurio Group S.A. abone el peaje adeudado.
Pese a los reclamos realizados expresaron su “especial preocupación por tratarse de una restricción a la libertad de tránsito de bienes estratégicos y sensibles para un país signatario” del Acuerdo de Santa Cruz de la Sierra, que establece el marco normativo para la navegación por esa arteria.
Además, alertaron que el país afectado “tiene comprometido el abastecimiento de combustible”, lo cual puede afectar el precio de este insumo.
Cabe señalar que días previos en el marco de la Secretaría Ejecutiva del Comité Intergubernamental de la Hidrovía Paraguay-Paraná, se conformó una mesa de trabajo entre los equipos técnicos de Administración General de Puertos (AGP) y la Comisión Permanente de Transporte de la Cuenca del Plata (CPTCP), la cual agrupa armadores de Argentina, Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay para el mantenimiento y mejoras en la infraestructura existente.