El juez federal Sebastián Casanello sobreseyó hoy al Presidente en la causa por escuchas ilegales telefónicas al revocar el procesamiento por entender que no hay pruebas para enviar a Macri a juicio oral.
En ese aspecto, remarcó que a lo largo de más de cinco años de investigación no se reunieron pruebas para demostrar que el Presidente hubiese estado al tanto de las escuchas ilegales a las que fueron sometidos su ex cuñado Néstor Leonardo y el familiar de víctimas del atentado a la AMIA Sergio Burstein.
Ambos habían pedido que Macri sea enviado a juicio oral con el resto de los procesados del caso, pero el juez desestimó estos planteos y sí tuvo en cuenta el dictamen del fiscal federal Jorge Di Lello, quien coincidió en la falta de pruebas contra el ex jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires
El fallo de Casanello podría ser apelado por alguna de las dos querellas ante la Cámara Federal porteña.
Con esta decisión, el procesamiento de Macri como supuesto partícipe de la red de escuchas montada bajo el amparo de la estructura del gobierno porteño quedó revocado.
Los demás procesados, entre ellos el ex jefe de la Policía Metropolitana Jorge “Fino” Palacios, fueron ya enviados a juicio oral.
Macri transfirió hoy las escuchas telefónicas a la Corte. El Departamento de Interceptación y Captación de Comunicaciones (Dicom) fue transferido del Ministerio Público Fiscal a la Corte Suprema de Justicia mediante un DNU.
El decreto 256/15 hace efectiva la transferencia de la tarea de las escuchas telefónicas junto “con la totalidad del personal, bienes, presupuesto vigente, activos y patrimonio afectados al Departamento de Interceptación y Captación de las Comunicaciones”.