El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Julián Domínguez, y el gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, acordaron hoy una agenda de trabajo del Plan para la Ganadería Argentina (Plan GanAr), y la implementación de la comercialización de carne por troceo en los establecimientos frigoríficos del ámbito provincial o municipal que comenzará en forma obligatoria a partir del 1° de noviembre de este año.
En el encuentro analizaron también la obra de “Optimización de la Infraestructura del Valle Bonaerense del Río Colorado”, que lleva adelante la cartera agropecuaria a través de la Diprose (Dirección de Gestión y Monitoreo de Programas y Proyectos Sectoriales y Especiales) con un financiamiento de parte del Banco Mundial por más de USD10 millones.
Entre lo conversado estuvo el inicio de la planificación de un esquema de obras complementarias al Plan Maestro del Río Salado, a través del Programa Agro XXI de la cartera nacional.
Tras el encuentro, Domínguez y Kicillof coincidieron en que están “ante el desafío enorme de incrementar nuestra producción ganadera de forma sostenible, en un momento donde el mundo demanda más alimentos”.
Troceo
Por decisión del Gobierno nacional, a partir del 1° de noviembre los establecimientos frigoríficos de tráfico federal, provincial o municipal deberán comercializar las carnes a través de unidades resultantes del fraccionamiento de las medias reses en trozos cuyos pesos individuales no superarán los 32 kilogramos.
Medida solicitada por matarifes y frigoríficos que será “una mejora en el sistema de distribución de carnes”, afirmaron los funcionarios.
Por otro lado, el titular de la cartera agropecuaria y el mandatario bonaerense resaltaron que “las obras de mitigación son claves para afrontar los desafíos del cambio climático”.
La obra de “Optimización de la Infraestructura del Valle Bonaerense del Río Colorado” busca mitigar el impacto ante la sequía a partir de la gestión eficiente del recurso hídrico.
Los trabajos permitirán fortalecer la economía local y mejorar las condiciones de vida de los más de 1.840 regantes, de los cuales el 90% son productores familiares.