En el primer trimestre de 2020, el impacto de las restricciones impuestas en el marco de la pandemia del covid-19 fueron incipientes en la dinámica del mercado laboral.
Según el informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) la tasa de actividad se ubicó en 47,1%, la tasa de empleo en 42,2% y la tasa de desocupación en 10,4%.
En la comparación respecto del cuarto trimestre de 2019 se observa que la tasa de empleo se redujo en 0,8 puntos porcentuales (p.p.), mientras que la ocupación demandante se redujo en 1,1 p.p. Como también ocurrió en los primeros trimestres de los últimos años, la tasa de desocupación mostró una suba de 1,5 en este trimestre. Todas estas variaciones son estadísticamente significativas.
Como consecuencia del mencionado incremento en la tasa de desocupación y de la disminución de la tasa de ocupados demandantes, la presión sobre el mercado de trabajo presentó un incremento de 0,7 p.p.
La reducción en la tasa de empleo se verificó con mayor incidencia en mujeres jóvenes (14 a 29 años) y en varones de entre 30 y 64 años. También entre quienes registran niveles educativos altos y entre los que se ocupan en el sector privado.
Las ramas de actividad en las que se observa mayor reducción de la tasa son construcción, transporte, almacenamiento y comunicaciones, enseñanza y servicios sociales y de salud.
Respecto a la tasa de desocupación se incrementó principalmente entre quienes tenían una ocupación anterior y, en términos de tiempo de búsqueda, crecieron especialmente quienes llevan de 3 a 6 meses buscando empleo.
Tanto en la comparación interanual como respecto del último trimestre, se verificaron aumentos en las tasas de empleo en la región Noreste y caídas en las regiones GBA, Noroeste, Pampeana y Patagonia.
La dependencia oficial dio cuenta también que la Formación Bruta de Capital Fijo, según estimaciones preliminares, experimentó en el primer trimestre de 2020 una disminución de 18,3% respecto del mismo período de 2019.
Esta merma se debió a una caída de 24,5% de la inversión en construcciones, una descenso de 17,3% de otras construcciones, -13,0% en maquinaria y equipo y una baja de 12,9% en equipo de transporte.
Dentro de maquinaria y equipo, el componente nacional descendió un 5,9% y el componente importado se contrajo un 16,2%. En equipo de transporte el componente nacional se retrotrajo 14,6% y el importado decreció 9,7%.